La Calidad y cumplimiento no son la misma cosa. Aquí te explicamos…
Desde hace mucho tiempo la calidad y el cumplimiento son términos que se han utilizado de manera intercambiable. Sin embargo, la verdad es que estas dos palabras significan cosas diferentes, y cuando se aplican en un entorno organizacional, la calidad y el cumplimiento son dos procesos muy diferentes que nos permiten que nos llevan a resultados diferentes.
Vamos a revisar primero cumplimiento.
¿Qué es cumplimiento?
Cumplimiento es el proceso de cumplir con el marco regulatorio que rige en tu industria específica para tratar de no caer en problemas legales. El cumplimiento también incluye el proceso de obtención de las certificaciones ISO y otros documentos solamente con la intención de mantenerse dentro del marco legal.
¿Qué es calidad?
Calidad se refiere a la superioridad inherente de un producto, servicio o proceso que se convierte en la métrica para otros productos, servicios y procesos en el futuro
Gestión de calidad
El estudio de McKinsey Probó que las compañías que proactiva y conscientemente se enfocan en la identificación y manejo de problemas de calidad, así como en la entrega consistente de valor, experimentaron una eficiencia operacional muy alta e incrementaron su productividad
Para una compañía que realmente vive la calidad, el cumplimiento no es una actividad forzosa, sino una métrica bien recibida que permite a la compañía implementar mejoras conscientes en su operación y sus productos finales.
Aquí es donde la compañía defiende la colaboración interdepartamental para lograr la mejora continua. Todos trabajan juntos para mejorar la calidad del producto, servicio o proceso. La calidad es percibida por cada departamento como una serie de cambios continuos y sistemáticos que pueden ayudarles a crear las mejores propuestas de valor. De hecho, cualquier decisión estratégica u operativa tomada por la compañía Y como único propósito mejorar la calidad general de sus productos, servicios y procesos. En Cordage la calidad es una mentalidad
Cumplimiento
Con frecuencia, el cumplimiento es visto como un mal necesario, algo que las compañías no quieren hacer, pero tienen que hacer. El objetivo es cumplir con todos los requisitos desde una perspectiva de auditoría y regulación. Cuando la mentalidad de cumplimiento rige en una compañía, el enfoque hacia las operaciones y la calidad resultante es muy poco convincente. Cada departamento empieza tomar algunas medidas regulatorias solo para mantener sus respectivos departamentos en cumplimiento con la ley. Hay muy poca o nula consideración por la calidad en general
Este tipo de enfoque puede ser devastador para las empresas, especialmente en una economía global. Aquí, no existe un esfuerzo continuo ni consciente para mejorar la calidad, solo un enfoque de calidad específico para el departamento, lo mínimo indispensable. Una vez que los departamentos individuales cumplen, el trabajo hacia la mejora continua se detiene.
SGC y Cumplimiento
La verdad es que enfocarse solo en el cumplimiento puede engañar al sistema y hacerle creer que la empresa está trabajando en la mejora continua cuando solo se está enfocando en cubrir los requerimientos legales mínimos. ¿Por qué? Porque una mentalidad de cumplimiento recompensa comportamientos y procesos cuestionables al fomentar una actitud poco saludable y perezosa dentro del lugar de trabajo
1. La calidad elevará el nivel de tu compañía
Una empresa que se enfoca solo en el cumplimiento, buscará engañar al sistema cumpliendo el nivel mínimo de las regulaciones requeridas. No se exigirán dar más porque no hay ninguna necesidad legal para hacerlo. Esta actitud puede restar valor a la calidad general de sus ofertas y reprimir la creatividad de la empresa.
Sin embargo, un ambiente enfocado en la calidad asegurará que la empresa busque conscientemente cumplir los requerimientos o implementar los cambios que no son mandatarios, pero que harán al producto, servicio o proceso significativamente mejor y más rentable.
2. Aísla a la empresa de posibles pérdidas y riesgos
Cuando trabajan por cumplir, las empresas solo pueden prepararse para los riesgos y retos ya conocidos. Pero este enfoque no las protege de eventos no anticipados. Esto solo puede suceder cuando la empresa desarrolla una mentalidad de calidad y trabaja proactivamente en el diseño de soluciones para problemas a los que aún no se ha enfrentado, pero que podría en el futuro.
Además, cuando se enfocan en la calidad, las empresas tienden a cometer menos errores, pues están más alertas y responsivas a los riesgos futuros. Como resultado, tendrán un número menor de acciones correctivas y preventivas, reduciendo así su costo total de calidad.
3. Genera nuevas oportunidades de negocio para las empresas
Una cultura de calidad y cumplimiento impulsa la mentalidad proactiva y el deseo de hacer más y entregar mejor. Esta mentalidad puede llevar a numerosas innovaciones, mejoras en productos y oportunidades de negocio. Considerando que el enfoque aquí es crear los mejores productos y servicios para los clientes (y no solamente cumplir con los requisitos legales) las empresas tienen más libertad y amplían su alcance para trabajar.
Pensar la calidad en vez del cumplimiento puede ayudar a las empresas a entregar valor real de largo plazo a sus clientes y al final ayudarlos a alcanzar el éxito.
En Cordage, nuestros Sistemas de Gestión de Calidad están diseñados para ayudarte a alcanzar no solo tus requisitos de cumplimiento, sino a promover una cultura de calidad en tu empresa.